La diabetes tipo 1 en niños es una enfermedad en la que el cuerpo de su hijo ya no produce una hormona importante (insulina). En este artículo, aprenderá sobre el tratamiento de la diabetes tipo 1 en niños.

Tratamiento de la diabetes tipo 1 en niños
Trabajará estrechamente con el equipo de tratamiento de diabetes de su hijo —médico, educador en diabetes y dietista— para mantener el nivel de azúcar en la sangre de su hijo lo más cercano posible a lo normal. El tratamiento para la diabetes tipo 1 incluye:
- Administrar insulina
- Cálculo de carbohidratos
- Monitoreo frecuente de azúcar en la sangre
- Alimentarse con alimentos saludables
- Ejercicio regular
Monitoreo de azúcar en la sangre
Necesitará revisar y registrar el azúcar en la sangre de su hijo al menos cuatro veces al día. Pero probablemente necesite comprobarlo con más frecuencia si su hijo no tiene un monitoreador continuo de glucosa.
Las pruebas frecuentes son la única manera de asegurarse de que el nivel de azúcar en la sangre de su hijo se mantenga dentro de su rango objetivo, que puede cambiar a medida que su hijo crece y cambia. El médico de su hijo le informará cuál es el rango objetivo de azúcar en la sangre de su hijo.
Monitoreo continuo de glucosa (CGM)
Los dispositivos de monitoreo continuo de glucosa (CGM) miden el azúcar en sangre cada pocos minutos utilizando un sensor temporal o implantado insertado bajo la piel. Algunos dispositivos muestran el resultado del azúcar en sangre en todo momento en un receptor o en su teléfono inteligente o reloj inteligente, mientras que otros requieren que revise el azúcar en sangre pasando el receptor sobre el sensor.
Insulina y otros medicamentos
Cualquiera que tenga diabetes tipo 1 necesita tratamiento de por vida con uno o más tipos de insulina para sobrevivir. Hay muchos tipos de insulina disponibles, incluyendo:
- Insulina de acción rápida. Este tipo de insulina comienza a funcionar dentro de los 15 minutos. Insulina lispro (Humalog, Admelog), aspart (NovoLog, Fiasp) y glulisina (Apidra) son ejemplos.
- Insulina de acción corta. La insulina humana (Humulin R, Novolin R) comienza a actuar alrededor de 30 minutos después de la inyección.
- Insulina de acción intermedia. La insulina NPH (Humulin N, Novolin N, Novolin Relion Insulin N) comienza a actuar en aproximadamente una a tres horas y dura de 12 a 24 horas.
- Insulinas de acción prolongada y de acción ultra prolongada. Terapias como la insulina glargina (Basaglar, Lantus, Toujeo) y la insulina detemir (Levemir) y degludec (Tresiba) pueden proporcionar cobertura durante 14 a 40 horas.
Opciones de inyección de insulina
Existen varias opciones para inyectar insulina, que incluyen:
- Aguja fina y jeringa.
- Pluma de insulina con aguja fina. Este dispositivo se parece a un bolígrafo, excepto que el cartucho está lleno de insulina.
- Una bomba de insulina. Este es un pequeño dispositivo que se usa en el exterior de su cuerpo que usted programa para administrar cantidades específicas de insulina durante el día y cuando come. Un tubo conecta un reservorio de insulina a un catéter que se inserta bajo la piel de su abdomen. También hay una opción de bomba sin tubo que implica llevar un pod que contiene insulina en su cuerpo combinado con un pequeño catéter que se inserta bajo su piel.

Bombas de insulina combinadas/montores de glucosa continuos
Un dispositivo llamado bomba aumentada por sensores combina una bomba de insulina y un monitor de glucosa continuo con un algoritmo sofisticado para administrar automáticamente insulina cuando es necesario. El objetivo es desarrollar un sistema completamente automático de «circuito cerrado», llamado páncreas artificial.
En este momento, está disponible lo que se conoce como un sistema híbrido de circuito cerrado. Las personas con diabetes tipo 1 aún tienen que informar al dispositivo cuántos carbohidratos comen y confirmar periódicamente los niveles de azúcar en sangre, pero el dispositivo ajusta automáticamente la administración de insulina a lo largo del día. Los dispositivos disponibles siguen siendo perfeccionados, y es probable que la investigación continúe hasta que un sistema completamente automatizado esté disponible.
Alimentación saludable
La comida es un gran componente de cualquier plan de tratamiento de diabetes, pero eso no significa que su hijo deba seguir una «dieta estricta para diabéticos». Al igual que el resto de la familia, la dieta de su hijo debe incluir regularmente alimentos que sean ricos en nutrientes y bajos en grasas y calorías, como:
- Verduras
- Frutas
- Proteínas magras
- Cereales integrales
El dietista de su hijo puede ayudarle a crear un plan de comidas que se ajuste a las preferencias alimenticias y objetivos de salud de su hijo, así como ayudarle a planificar aperitivos ocasionales. El dietista también le enseñará a contar carbohidratos en los alimentos para que pueda utilizar esa información al calcular las dosis de insulina.
Actividad física
Todos necesitan ejercicio aeróbico regular, y los niños que tienen diabetes tipo 1 no son la excepción. Anime a su hijo a realizar al menos 60 minutos de actividad física diaria o, mejor aún, haga ejercicio junto con su hijo. Haga de la actividad física parte de la rutina diaria de su hijo.
Pero recuerde que la actividad física generalmente reduce el azúcar en la sangre, y puede afectar los niveles de azúcar en sangre durante horas después del ejercicio, incluso durante la noche. Si su hijo comienza una nueva actividad, revise el azúcar en la sangre de su hijo más a menudo de lo habitual hasta que aprenda cómo reacciona su cuerpo a la actividad. Puede que necesite ajustar el plan de comidas de su hijo o las dosis de insulina para compensar la actividad aumentada.
Flexibilidad
El azúcar en la sangre a veces puede cambiar de manera impredecible. Pregunte al equipo de tratamiento de diabetes de su hijo cómo manejar estos desafíos y otros:
- Comportamientos de alimentación selectiva. Niños muy pequeños con diabetes tipo 1 pueden no terminar lo que tienen en sus platos, lo que puede ser un problema si ya les ha administrado insulina por esa comida.
- Enfermedades. Las enfermedades tienen efectos variados sobre las necesidades de insulina de su hijo. Las hormonas producidas durante la enfermedad elevan los niveles de azúcar en la sangre, pero la reducción de la ingesta de carbohidratos debido a la falta de apetito o vómitos disminuye la necesidad de insulina. El médico de su hijo recomendará una vacuna contra la gripe cada año y también puede recomendar la vacuna contra la neumonía.
- Crecimiento rápido y pubertad. Justo cuando ha dominado las necesidades de insulina de su hijo, su hijo crece aparentemente de la noche a la mañana, y de repente no recibe suficiente insulina. Las hormonas también pueden afectar las necesidades de insulina, particularmente en las adolescentes cuando comienzan a menstruar.
- Sueño. Para evitar problemas con el azúcar bajo durante la noche, puede que necesite ajustar la rutina de insulina de su hijo.
Cuidado médico de seguimiento
Su hijo necesitará citas de seguimiento regulares para asegurar un buen manejo de la diabetes y para revisar los niveles de A1C. Los médicos generalmente recomiendan un A1C de 7.5 o inferior para todos los niños y adolescentes.
Su médico también revisará periódicamente estos factores en su hijo:
- Presión arterial
- Crecimiento
- Niveles de colesterol
- Función tiroidea
- Función renal
- Función hepática
Señales de alarma
A pesar de sus mejores esfuerzos, a veces surgirán problemas. Ciertas complicaciones a corto plazo de la diabetes tipo 1 requieren atención inmediata o podrían volverse muy serias, incluyendo:
- Bajo nivel de azúcar en la sangre (hipoglucemia)
- Alto nivel de azúcar en la sangre (hiperglucemia)
- Cetoacidosis diabética (DKA)
Bajo nivel de azúcar en la sangre (hipoglucemia)
La hipoglucemia es un nivel de azúcar en la sangre por debajo del rango objetivo de su hijo. Los niveles de azúcar en la sangre pueden bajar por muchas razones, incluyendo saltarse una comida, realizar más actividad física de lo normal o inyectarse demasiada insulina. El azúcar bajo no es poco común en personas con diabetes tipo 1, pero si no se trata rápidamente, los síntomas empeorarán.
Las señales y síntomas de bajo nivel de azúcar en la sangre incluyen:
- Temblores
- Hambre
- Sudoración
- Irritabilidad y otros cambios de humor
- Dificultad para concentrarse o confusión
- Mareos o aturdimiento
- Pérdida de coordinación
- Disartria (voz arrastrada)
- Pérdida de conciencia
Enseñe a su hijo los síntomas de bajo nivel de azúcar en la sangre. En caso de duda, su hijo siempre debe hacer una prueba de azúcar en la sangre. Si un medidor de glucosa en sangre no está disponible y su hijo presenta síntomas de bajo nivel de azúcar en la sangre, trate el bajo nivel de azúcar, y luego haga la prueba tan pronto como sea posible.
Si su hijo tiene bajo nivel de azúcar en la sangre:
- Pídele a su hijo que consuma de 15 a 20 gramos de un carbohidrato de acción rápida, como jugo de fruta, tabletas de glucosa, caramelos duros, refresco regular (no dietético) u otra fuente de azúcar. Los alimentos con grasas añadidas, como el chocolate o el helado, no elevan el azúcar en la sangre tan rápido porque la grasa ralentiza la absorción del azúcar.
- Vuelva a comprobar el nivel de azúcar en la sangre de su hijo en aproximadamente 15 minutos para asegurarse de que sea normal, y repita según sea necesario hasta obtener un resultado normal.
Si un bajo nivel de azúcar lleva a su hijo a perder la conciencia, puede ser necesaria una inyección de emergencia de una hormona que estimula la liberación de azúcar en la sangre (glucagón).
Alto nivel de azúcar
La hiperglucemia es un nivel de azúcar en la sangre por encima del rango objetivo de su hijo. Los niveles de azúcar en la sangre pueden subir por muchas razones, incluyendo enfermedades, comer en exceso, consumir los tipos incorrectos de alimentos y no tomar suficiente insulina.
Las señales y síntomas de alto nivel de azúcar en la sangre incluyen:
- Orinar con frecuencia
- Aumento de la sed o boca seca
- Visión borrosa
- Fatiga
- Náuseas
Si sospecha que hay un alto nivel de azúcar en la sangre, pruebe el nivel de azúcar en la sangre de su hijo. Si el nivel de azúcar en la sangre de su hijo es superior al rango objetivo, siga el plan de tratamiento de diabetes de su hijo o consulte al médico de su hijo. Los niveles altos de azúcar en la sangre no disminuyen rápidamente, así que pregunte a su médico cuánto tiempo debe esperar hasta comprobar nuevamente el azúcar en la sangre de su hijo.
Si su hijo tiene un resultado de prueba de azúcar en sangre superior a 240 mg/dL (13.3 mmol/L), su hijo debería utilizar un palo de prueba de orina para verificar si hay cetonas. No permita que su hijo haga ejercicio si su nivel de azúcar en sangre es alto o si hay cetonas presentes.
Cetoacidosis diabética (DKA)
Una falta severa de insulina hace que el cuerpo de su hijo descomponga grasa para obtener energía. Este proceso hace que el cuerpo produzca una sustancia llamada cetonas. El exceso de cetonas se acumula en la sangre de su hijo, creando una condición potencialmente mortal conocida como cetoacidosis diabética.
Las señales y síntomas de la DKA incluyen:
- Sed o boca muy seca
- Aumento de la micción
- Piel seca o enrojecida
- Náuseas, vómitos o dolor abdominal
- Un olor dulce y afrutado en el aliento de su hijo
- Confusión
Si sospecha de DKA, verifique la orina de su hijo en busca de cetonas en exceso con un kit de prueba de cetonas de venta libre. Si los niveles de cetonas son altos, llame al médico de su hijo o busque atención de emergencia.
Estilo de vida y remedios caseros
Seguir un plan de tratamiento para la diabetes requiere atención las 24 horas y cambios significativos en el estilo de vida, lo que puede ser frustrante a veces. Nadie puede hacerlo a la perfección. Pero sus esfuerzos valen la pena. Un manejo cuidadoso de la diabetes tipo 1 ayuda a reducir el riesgo de complicaciones graves para su hijo.
Cuando su hijo crezca:
- Anime a su hijo a asumir un papel cada vez más activo en el manejo de su diabetes
- Enfatice la importancia del cuidado de la diabetes de por vida
- Enseñe a su hijo cómo medir el azúcar en la sangre y inyectarse insulina
- Ayude a su hijo a tomar decisiones alimentarias inteligentes
- Anime a su hijo a mantenerse físicamente activo
- Fomente una relación entre su hijo y el equipo de tratamiento de diabetes
- Asegúrese de que su hijo lleve una etiqueta de identificación médica
Los hábitos que enseñe a su hijo hoy ayudarán a su hijo a disfrutar de una vida activa y saludable con diabetes tipo 1.
Escuela y diabetes
Necesitará trabajar con la enfermera escolar y los maestros de su hijo para asegurarse de que conozcan los síntomas de los niveles altos y bajos de azúcar en sangre. Es posible que la enfermera escolar necesite administrar insulina o verificar los niveles de azúcar en sangre de su hijo. La ley federal protege a los niños con diabetes, y las escuelas deben hacer adaptaciones razonables para garantizar que todos los niños reciban una educación adecuada.
Terapias alternativas
Las personas que tienen diabetes tipo 1 deben usar insulina todos los días para sobrevivir. Ningún método de tratamiento alternativo o suplemento dietético puede reemplazar la insulina para las personas con diabetes tipo 1.