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Tratamiento de la epilepsia
Los médicos generalmente comienzan tratando la epilepsia con medicamentos. Si los medicamentos no pueden tratar la epilepsia, los médicos pueden proponer cirugía u otro tipo de tratamiento.
Medicación en el tratamiento de la epilepsia
La mayoría de las personas con epilepsia pueden llegar a estar libres de convulsiones tomando un solo medicamento anti-convulsivo, que también se llama medicamento antiepiléptico. Otras personas pueden reducir la frecuencia e intensidad de sus convulsiones tomando una combinación de medicamentos.
Muchos niños con epilepsia que no están experimentando síntomas de epilepsia pueden eventualmente interrumpir los medicamentos y llevar una vida sin convulsiones. Muchos adultos pueden suspender la medicación después de dos años o más sin convulsiones. Su médico le aconsejará sobre el momento adecuado para dejar de tomar medicamentos.
Encontrar el medicamento y la dosis correctos puede ser complejo. Su médico considerará su condición, la frecuencia de las convulsiones, su edad y otros factores al elegir qué medicamento recetar. Su médico también revisará cualquier otro medicamento que pueda estar tomando, para asegurarse de que los medicamentos antiepilépticos no interactúen con ellos.
Es probable que su médico primero recete un solo medicamento a una dosis relativamente baja y pueda aumentar la dosis gradualmente hasta que sus convulsiones estén bien controladas.
Los medicamentos anti-convulsivos pueden tener algunos efectos secundarios. Los efectos secundarios leves incluyen:
- Fatiga
- Vértigo
- Aumento de peso
- Pérdida de densidad ósea
- Erupciones cutáneas
- Pérdida de coordinación
- Problemas del habla
- Problemas de memoria y pensamiento
Los efectos secundarios más severos pero raros incluyen:
- Depresión
- Pensamientos y comportamientos suicidas
- Erupción cutánea severa
- Inflamación de ciertos órganos, como el hígado
Para lograr el mejor control de las convulsiones posible con medicamentos, siga estos pasos:
- Tomar los medicamentos exactamente como se los recetaron.
- Siempre llame a su médico antes de cambiar a una versión genérica de su medicamento o de tomar otros medicamentos recetados, medicamentos de venta libre o remedios herbales.
- Nunca deje de tomar su medicamento sin hablar primero con su médico.
- Notifique a su médico de inmediato si nota sentimientos nuevos o aumentados de depresión, pensamientos suicidas o cambios inusuales en su estado de ánimo o comportamiento.
- Informe a su médico si tiene migrañas. Los médicos pueden recetar uno de los medicamentos antiepilépticos que pueden prevenir sus migrañas y tratar la epilepsia.
Al menos la mitad de las personas recién diagnosticadas con epilepsia se volverán libres de convulsiones con su primer medicamento. Si los medicamentos antiepilépticos no proporcionan resultados satisfactorios, su médico puede sugerir cirugía u otras terapias. Tendrá citas de seguimiento regulares con su médico para evaluar su condición y medicamentos.
Cirugía para tratar la epilepsia
Cuando los medicamentos no logran un control adecuado de las convulsiones, la cirugía puede ser una opción. Con la cirugía de epilepsia, un cirujano elimina el área de su cerebro que está causando las convulsiones.
Los médicos generalmente realizan la cirugía cuando las pruebas muestran que:
- Sus convulsiones se originan en un área pequeña y bien definida de su cerebro
- El área de su cerebro que se operará no interfiere con funciones vitales como el habla, el lenguaje, la función motora, la visión o la audición
Aunque muchas personas continúan necesitando algún medicamento para ayudar a prevenir convulsiones después de una cirugía exitosa, es posible que pueda tomar menos medicamentos y reducir sus dosis.
En un pequeño número de casos, la cirugía para la epilepsia puede causar complicaciones, como alterar permanentemente sus habilidades de pensamiento (cognitivas). Hable con su cirujano sobre su experiencia, tasas de éxito y tasas de complicación con el procedimiento que está considerando.
Terapeas alternativas
Aparte de los medicamentos y la cirugía, estas terapias potenciales ofrecen un método alternativo para tratar la epilepsia:
- Estimulación del nervio vago. En la estimulación del nervio vago, los médicos implantan un dispositivo llamado estimulador del nervio vago debajo de la piel de su pecho, similar a un marcapasos del corazón. Los cables del estimulador están conectados al nervio vago en su cuello. El dispositivo alimentado por batería envía ráfagas de energía eléctrica a través del nervio vago y a su cerebro. No está claro cómo este método inhibe las convulsiones, pero el dispositivo puede reducir las convulsiones en un 20 a 40 por ciento. La mayoría de las personas aún necesitan tomar medicamento antiepiléptico, aunque algunos pueden ser capaces de reducir su dosis de medicación. Puede experimentar efectos secundarios de la estimulación del nervio vago, como dolor de garganta, voz ronca, dificultad para respirar o tos.
- Dietas cetogénicas. Algunos niños con epilepsia han podido reducir sus convulsiones siguiendo una dieta estricta alta en grasas y baja en carbohidratos. En esta dieta, llamada dieta cetogénica, el cuerpo descompone las grasas en lugar de carbohidratos para obtener energía. Después de algunos años, algunos niños pueden ser capaces de dejar la dieta cetogénica — bajo la estricta supervisión de sus médicos — y permanecer libres de convulsiones. Consulte a un médico si usted o su hijo está considerando una dieta cetogénica. Es importante asegurarse de que su hijo no se desnutra mientras sigue la dieta.
Los efectos secundarios de una dieta cetogénica pueden incluir deshidratación, estreñimiento, crecimiento lento debido a deficiencias nutricionales y un aumento de ácido úrico en la sangre, lo que puede causar cálculos renales. Estos efectos secundarios son poco comunes si la dieta se supervisa adecuadamente.
Seguir una dieta cetogénica puede ser un desafío. Las dietas de bajo índice glucémico y las dietas Atkins modificadas ofrecen alternativas menos restrictivas que aún pueden proporcionar algún beneficio para el control de las convulsiones.
- Estimulación cerebral profunda. En la estimulación cerebral profunda, los cirujanos implantan electrodos en una parte específica de su cerebro, típicamente en el tálamo. Los electrodos están conectados a un generador implantado en su pecho o su cráneo que envía pulsos eléctricos a su cerebro y puede reducir sus convulsiones.
Tratamientos futuros potenciales
Los investigadores están estudiando muchos tratamientos nuevos potenciales para la epilepsia, incluyendo:
- Neuroestimulación responsiva. Se están investigando dispositivos implantables, similares a marcapasos, que ayudan a prevenir convulsiones. Estos dispositivos de estimulación responsiva o de circuito cerrado analizan los patrones de la actividad cerebral para detectar convulsiones antes de que ocurran y enviar una carga eléctrica o medicamento para detener la convulsión.
- Estimulación continua de la zona de inicio de las convulsiones (estimulación subumbral). La estimulación subumbral — estimulación continua a un área de su cerebro por debajo de un nivel que es físicamente notable — parece mejorar los resultados de las convulsiones y la calidad de vida para algunas personas con convulsiones. Este enfoque de tratamiento puede funcionar en personas que tienen convulsiones que comienzan en un área del cerebro que no se puede eliminar porque afectaría el habla y las funciones motoras (área de eloquencia). O podría beneficiar a personas cuyos síntomas de convulsión significan que sus posibilidades de un tratamiento exitoso con neuroestimulación responsiva son bajas.
- Cirugía mínimamente invasiva. Nuevas técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas, como la ablación láser guiada por MRI, muestran promesas al reducir las convulsiones con menos riesgos que la cirugía abierta tradicional para la epilepsia.
- Ablación láser estereotáctica o radiosurgía estereotáctica. Para algunos tipos de epilepsia, la ablación láser estereotáctica o la radiosurgía estereotáctica pueden proporcionar un tratamiento efectivo cuando un procedimiento abierto puede ser demasiado arriesgado. En estos procedimientos, los médicos dirigen radiación a la área específica en el cerebro que causa convulsiones para destruir ese tejido en un esfuerzo por controlar mejor las convulsiones.
- Dispositivo de estimulación nerviosa externa. Similar a la estimulación del nervio vago, este dispositivo estimularía nervios específicos para reducir la frecuencia de las convulsiones. Pero a diferencia de la estimulación del nervio vago, este dispositivo se usaría externamente para que no se necesite cirugía para implantarlo.





Estilo de vida y cuidados en casa
Comprender su condición puede ayudarle a tomar mejor control de ella:
- Tomar su medicamento correctamente. No ajuste su dosis antes de consultar con su médico. Si siente que su medicamento debería ser cambiado, discútalo con su médico.
- Dormir lo suficiente. La falta de sueño puede desencadenar convulsiones. Asegúrese de descansar adecuadamente cada noche.
- Usar una pulsera de alerta médica. Esta pulsera de alerta ayudará al personal de emergencia a saber cómo tratarlo correctamente.
- Realizar ejercicio. Hacer ejercicio puede ayudar a mantenerlo físicamente saludable y reducir la depresión. Asegúrese de beber suficiente agua y descanse si se siente fatigado durante el ejercicio.
Además, tome decisiones de vida saludables, como manejar el estrés, limitar las bebidas alcohólicas y evitar los cigarrillos.
Enfrentando y apoyándose
Las convulsiones no controladas y sus efectos en su vida pueden sentirse estresantes o llevar a la depresión en ocasiones. Es importante no dejar que la epilepsia lo retenga. Aún puede vivir una vida activa y plena. Para enfrentar esta enfermedad, debe:
- Educarse a usted mismo y a sus amigos y familiares sobre la epilepsia para que comprendan la condición.
- Tratar de ignorar las reacciones negativas de las personas. Aprenda sobre la epilepsia para que conozca los hechos en lugar de las ideas erróneas sobre la enfermedad. Y trate de mantener su sentido del humor.
- Vivir de la manera más independiente posible. Continúe trabajando, si es posible. Si no puede conducir debido a sus convulsiones, investigue las opciones de transporte público cerca de usted. Si no se le permite conducir, podría considerar mudarse a una ciudad con buenas opciones de transporte público.
- Encontrar un médico que le guste y con quien se sienta cómodo.
- Tratar de no preocuparse constantemente por tener una convulsión.
- Encontrar un grupo de apoyo para la epilepsia para conocer a personas que entienden por lo que está pasando.
Si sus convulsiones son tan severas que no puede trabajar fuera de su hogar, aún hay maneras de sentirse productivo y conectado con las personas. Puede considerar trabajar desde casa.
Haga saber a las personas con las que trabaja y vive cómo manejar correctamente una convulsión en caso de que estén con usted cuando tenga una convulsión. Puede ofrecerles sugerencias, como:
- Rodar cuidadosamente a la persona de lado.
- Colocar algo suave debajo de su cabeza.
- Aflojar la ropa del cuello.
- No intente poner sus dedos o cualquier otra cosa en la boca de la persona. Nadie ha «tragado» su lengua durante una convulsión – es físicamente imposible.
- No intente restringir a alguien que está teniendo una convulsión.
- Si la persona está en movimiento, aleje los objetos peligrosos.
- Quédese con la persona hasta que llegue el personal médico.
- Observe a la persona de cerca para que pueda proporcionar detalles sobre lo que sucedió.
- Anote la duración de las convulsiones.
- Mantenga la calma durante las convulsiones.
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