La enfermedad de Lyme en su etapa tardía—también conocida como enfermedad de Lyme diseminada tardía—puede afectar gravemente las articulaciones, el sistema nervioso y, a veces, el corazón. Si los médicos no tratan la enfermedad de Lyme en etapa temprana de manera oportuna, esta infección puede diseminarse por todo el cuerpo, causando síntomas crónicos que son más difíciles de eliminar. En este artículo, aprenderás sobre cómo los profesionales de la salud diagnostican y tratan la enfermedad de Lyme en etapa tardía, cuáles son los resultados y qué debes tener en cuenta durante el tratamiento.

Entendiendo la enfermedad de Lyme en etapa tardía
La enfermedad de Lyme en etapa tardía generalmente se desarrolla entre 6 y 36 meses después de la picadura inicial de la garrapata. En este momento, la bacteria Borrelia burgdorferi se ha diseminado más allá de la piel y puede causar:
- Artritis de Lyme – dolor articular persistente e hinchazón de las articulaciones, especialmente en las rodillas.
- Síntomas neurológicos – tales como parálisis facial, pérdida de memoria, entumecimiento, dolor agudo o radiculopatía.
- Neuroborreliosis – inflamación del cerebro o la médula espinal.
- Encefalopatía – problemas cognitivos, alteraciones del sueño o cambios de humor.
- Compromiso cardíaco (raro en etapa tardía) – como bloqueo cardíaco o palpitaciones.
Esta etapa es más común en pacientes que nunca fueron tratados o que recibieron un tratamiento insuficiente durante la infección inicial.

Cómo diagnostican los médicos la enfermedad de Lyme en etapa tardía
El diagnóstico en la etapa tardía se basa en la evaluación clínica y pruebas de laboratorio. Los médicos evaluarán los síntomas y la historia médica y a menudo solicitarán estas pruebas:
- Pruebas de anticuerpos en dos pasos – ELISA seguida de Western blot para detectar anticuerpos contra la bacteria Borrelia burgdorferi.
- Análisis de líquido sinovial – en casos de artritis.
- Examen del líquido cefalorraquídeo – si están presentes síntomas neurológicos.
- Prueba de neuroimagen – para descartar otras causas de deterioro cognitivo o neurológico.
Debes saber que en la etapa tardía, las pruebas de anticuerpos a menudo son fuertemente positivas debido a la prolongada exposición del sistema inmunológico a la bacteria. Sin embargo, pueden ocurrir falsos positivos, especialmente en personas con trastornos autoinmunes.
Tratamiento antibiótico para la enfermedad de Lyme en etapa tardía
Los médicos suelen tratar la enfermedad de Lyme en etapa tardía con cursos más largos de antibióticos en comparación con la infección en etapa temprana. La elección del fármaco y la vía de administración dependen de los síntomas específicos.
Artritis de Lyme (sin síntomas neurológicos)
Los médicos generalmente prescriben:
- Doxiciclina oral 100 mg dos veces al día durante 28 días
- Fármacos alternativos: Amoxicilina 500 mg tres veces al día o cefuroxima 500 mg dos veces al día durante la misma duración
Si la hinchazón articular persiste o regresa después de la terapia oral, a veces se recomienda un segundo curso de 28 días. Sin embargo, usar antibióticos orales por más de 2 meses generalmente no proporciona beneficios adicionales y puede aumentar los riesgos.
Enfermedad de Lyme neurológica (neuroborreliosis)
Los médicos a menudo prescriben antibióticos intravenosos, tales como:
- Ceftriaxona 2 g intravenosa una vez al día durante 14–28 días
- Fármacos alternativos: Cefotaxima o penicilina G intravenosa a alta dosis
Normalmente recibirás tratamiento intravenoso en un hospital o a través de un sistema intravenoso en casa. Los síntomas suelen mejorar gradualmente en un plazo de 3 a 6 semanas, no de inmediato.
Encefalopatía de Lyme o síntomas neurocognitivos crónicos
Esta condición provoca fatiga, alteraciones del sueño, problemas de memoria y depresión. Sin embargo, los estudios han mostrado un beneficio limitado de antibióticos extendidos en estos casos. Los médicos suelen recomendar:
- Antibióticos intravenosos estándar como se indicó anteriormente (si se confirma infección activa)
- Cuidado de apoyo, incluyendo terapia cognitiva y manejo del sueño
- Evaluación para el síndrome de enfermedad de Lyme post-tratamiento si los síntomas persisten a pesar del tratamiento
Síndrome de enfermedad de Lyme post-tratamiento
Después de completar los antibióticos, alrededor del 10–20% de los pacientes continúan experimentando fatiga, dolor articular o dificultades cognitivas. Esta condición no se debe a una infección activa, sino que puede resultar de:
- Respuesta inmune residual
- Daño tisular
- Función neurológica alterada
Los médicos no recomiendan terapia antibiótica prolongada para el síndrome de enfermedad de Lyme post-tratamiento. En cambio, podrías beneficiarte de:
- Tratamiento sintomático (analgésicos, antidepresivos)
- Terapias de rehabilitación
- Terapia cognitivo-conductual para apoyo en salud mental
El síndrome de enfermedad de Lyme post-tratamiento puede durar de 6 meses hasta 2 años, pero muchos pacientes mejoran con el tiempo y el cuidado de apoyo.
Cosas de las que debe tener precaución durante el tratamiento
Cuidado con la reacción de Jarisch–Herxheimer
Cuando comiences el tratamiento con antibióticos, puedes desarrollar un empeoramiento temporal de los síntomas dentro de 24–48 horas. Este problema ocurre porque las bacterias moribundas liberan sustancias inflamatorias. Podrías sentir escalofríos, fiebre, dolor muscular o fatiga aumentada. Los médicos suelen recomendar:
- Descanso
- Beber abundantes líquidos
- Medicamentos antiinflamatorios como ibuprofeno
Esta reacción no es una respuesta alérgica y no requiere que se detengan los antibióticos.
Evitar antibióticos de larga duración innecesarios
Varios estudios han encontrado que la terapia antibiótica prolongada (más de 4–8 semanas) no proporciona beneficios adicionales en la enfermedad de Lyme en etapa tardía y puede causar:
- Resistencia a los antibióticos
- Severos efectos secundarios como infección por Clostridium difficile
- Infecciones en la línea intravenosa o trombosis
La Sociedad Americana de Enfermedades Infecciosas (IDSA) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades desaconsejan firmemente el uso prolongado de antibióticos sin infección probada.
Considerar co-infecciones por picaduras de garrapatas
Las garrapatas pueden transmitir otras infecciones, tales como:
- Babesiosis
- Anaplasmosis
- Ehrlichiosis
Si no mejoras con el tratamiento para la enfermedad de Lyme, tu médico puede realizar pruebas para estas co-infecciones y ajustar tu plan de tratamiento en consecuencia.
Monitorear los efectos secundarios de los antibióticos
Los efectos secundarios comunes incluyen:
- Doxiciclina – fotosensibilidad, malestar estomacal
- Ceftriaxona – lodo biliar, diarrea, reacciones alérgicas
- Amoxicilina – erupción cutánea, infecciones por hongos
Siempre informa a tu médico sobre nuevos síntomas o síntomas que empeoren.