La diabetes es una enfermedad en la que los niveles de glucosa en sangre, o azúcar en la sangre, son demasiado altos. La glucosa proviene de los alimentos que consumes. La insulina es una hormona que ayuda a que la glucosa entre en tus células para proporcionarles energía. En la diabetes tipo 1, tu cuerpo no produce insulina. En la diabetes tipo 2, que es el tipo más común, tu cuerpo no produce o no utiliza la insulina de manera eficiente. Sin suficiente insulina, la glucosa permanece en tu sangre. También puedes tener prediabetes. Esto significa que tu azúcar en la sangre es más alto de lo normal, pero no lo suficiente como para ser considerado diabetes. Tener prediabetes te pone en un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
A lo largo del tiempo, tener demasiada glucosa en tu sangre puede causar complicaciones graves. Esta condición puede dañar tus ojos, riñones y nervios. La diabetes también puede causar enfermedades del corazón, accidentes cerebrovasculares e incluso la necesidad de amputar una extremidad. Las mujeres embarazadas también pueden desarrollar diabetes, conocida como diabetes gestacional.
Complicaciones de la diabetes mellitus
Las complicaciones a largo plazo de la diabetes se desarrollan gradualmente. Cuanto más tiempo tengas diabetes — y cuanto menos controlados estén tus niveles de azúcar en sangre — mayor será el riesgo de complicaciones. Eventualmente, las complicaciones de la diabetes pueden ser discapacitantes o incluso amenazantes para la vida. Las posibles complicaciones de la diabetes incluyen:
- Enfermedades cardiovasculares. La diabetes aumenta drásticamente el riesgo de diversos problemas cardiovasculares, incluyendo enfermedad coronaria con dolor en el pecho, infarto, accidente cerebrovascular y estrechamiento de las arterias (aterosclerosis). Si tienes diabetes, es más probable que desarrolles enfermedades del corazón o accidentes cerebrovasculares.
- Daño nervioso (neuropatía). El exceso de azúcar puede dañar las paredes de los pequeños vasos sanguíneos (capilares) que nutren tus nervios, especialmente en las piernas. Esta condición puede causar hormigueo, entumecimiento, sensación de ardor o dolor que generalmente comienza en las puntas de los dedos de los pies o las manos y se propaga gradualmente hacia arriba. Si se deja sin tratar, podrías perder toda la sensación en las extremidades afectadas. El daño a los nervios relacionados con la digestión puede causar problemas como náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento. Para los hombres, puede llevar a disfunción eréctil.
- Daño renal (nefilopatía). Los riñones contienen millones de pequeños grupos de vasos sanguíneos (glomérulos) que filtran los desechos de tu sangre. La diabetes puede dañar este delicado sistema de filtración. Un daño severo puede llevar a la insuficiencia renal o a enfermedad renal en etapa terminal irreversible, lo que puede requerir diálisis o un trasplante de riñón.
- Daño ocular (retinopatía). La diabetes puede dañar los vasos sanguíneos de la retina (retinopatía diabética), lo que puede llevar a la ceguera. La diabetes también aumenta el riesgo de otras condiciones graves de visión, como cataratas y glaucoma.
- Daño en los pies. El daño nervioso en los pies o la mala circulación sanguínea a los pies aumenta el riesgo de diversas complicaciones en los pies. Si se deja sin tratamiento, cortes y ampollas pueden desarrollar infecciones graves, que a menudo cicatrizan mal. Estas infecciones pueden requerir eventual amputación de dedos, pie o pierna.
- Problemas en la piel. La diabetes puede dejarte más susceptible a problemas en la piel, incluyendo infecciones bacterianas y fúngicas.
- Discapacidad auditiva. Los problemas auditivos son más comunes en personas con diabetes.
- Enfermedad de Alzheimer. La diabetes tipo 2 puede aumentar el riesgo de demencia, como la enfermedad de Alzheimer. Cuanto peor sea tu control de azúcar en sangre, mayor parece ser el riesgo. Aunque existen teorías sobre cómo podrían estar relacionadas estas enfermedades, ninguna ha sido comprobada hasta ahora.
- Depresión. Los síntomas de depresión son comunes en personas con diabetes tipo 1 y tipo 2. La depresión puede afectar el manejo de la diabetes.


Complicaciones de la diabetes gestacional
La mayoría de las mujeres que tienen diabetes gestacional dan a luz a bebés sanos. Sin embargo, los niveles de azúcar en sangre no tratados o no controlados pueden causar problemas para ti y para tu bebé.
Complicaciones en tu bebé pueden ocurrir como resultado de la diabetes gestacional, incluyendo:
- Crecimiento excesivo. La glucosa extra puede cruzar la placenta, lo que hace que el páncreas de tu bebé produzca insulina adicional. Este proceso puede causar que tu bebé crezca demasiado (macrosomía). Los bebés muy grandes son más propensos a requerir un parto por cesárea.
- Bajos niveles de azúcar en sangre. A veces, los bebés de madres con diabetes gestacional desarrollan bajos niveles de azúcar en sangre (hipoglucemia) poco después de nacer debido a que su propia producción de insulina es alta. Alimentaciones rápidas y, a veces, una solución de glucosa intravenosa pueden normalizar los niveles de azúcar en sangre del bebé.
- Diabetes tipo 2 más adelante en la vida. Los bebés de madres que han tenido diabetes gestacional tienen un mayor riesgo de desarrollar obesidad y diabetes tipo 2 más adelante en la vida.
- Muerte. La diabetes gestacional no tratada puede resultar en la muerte de un bebé ya sea antes o poco después del nacimiento.
Complicaciones en la madre también pueden ocurrir como resultado de la diabetes gestacional, incluyendo:
- Preeclampsia. Esta condición se caracteriza por hipertensión, exceso de proteínas en la orina, y hinchazón en las piernas y pies. La preeclampsia puede llevar a complicaciones graves o incluso amenazantes para la vida tanto para la madre como para el bebé.
- Diabetes gestacional posterior. Una vez que has tenido diabetes gestacional en un embarazo, es más probable que la tengas nuevamente en el próximo embarazo. También es más probable que desarrolles diabetes — típicamente diabetes tipo 2 — a medida que envejezcas.
Complicaciones de la prediabetes
La prediabetes puede desarrollarse en diabetes tipo 2.