Algunos gusanos parasitarios que pueden vivir dentro del cuerpo humano también pueden aumentar el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer.
Opisthorchis viverrini y Clonorchis sinensis son duelas hepáticas (un tipo de gusano plano) y han sido vinculadas a un mayor riesgo de desarrollar cáncer de los conductos biliares. Los conductos biliares son tubos que conectan el hígado con los intestinos. Las infecciones por Opisthorchis viverrini y Clonorchis sinensis provienen de consumir pescado de agua dulce crudo o poco cocido. Los casos de infección ocurren principalmente en el este de Asia y son raros en otras partes del mundo.

Schistosoma haematobium es un parásito que se encuentra en el agua de algunos países de Oriente Medio, África y Asia. La infección con este parásito (una enfermedad llamada esquistosomiasis) ha sido vinculada al cáncer de vejiga. Actualmente también se están estudiando las relaciones entre Schistosoma haematobium y otros tipos de cáncer.
